"Dios mío, te amo, pero... ¡enséñame a amar!".
San José María Escrivá de Balaguer

El hábito de los cofrades se compone de túnica gris, ceñida a la cintura con un cíngulo blanco trenzado, con capucha negra y con escapulario de color negro en cuyo centro van bordadas en hilo blanco las letras JHS del escudo de la cofradía.

Los guantes son de color negro y, colgada al cuello, por encima de la capucha, los penitentes llevan la medalla de la Cofradía, que pende de un cordón trenzado de color blanco.

Los penitentes portan el farol de vela de la Cofradía.